“ESTAMOS REALMENTE ESPERANDO VOLVER A LA NORMALIDAD O ESTAMOS LISTOS PARA CONSTRUIR ALGO DIFERENTE?”

“Algo diferente” suena incierto, impreciso. La ambigüedad suele incomodar y hasta puede dar miedo si estamos acostumbrados a lo predecible y concreto. Lo que cada quien se imagina como “algo diferente” depende de lo que supone como normal, pero también varía de acuerdo a lo que se imagina posible.
“We cannot create what we cannot imagine” - Lucille Clifton
Las historias con las que nos rodeamos y a lo que prestamos atención son lo que alimentan directamente nuestra imaginación y conciencia. Hace ya unos años que conocí a Jamie**, la inspiración principal que ideó este viaje. Antes de conocerlo, no sabía qué era el cicloviaje, ni mucho menos que fuera un estilo de vida emprendido por tantos atrevidos y rebeldes alrededor del mundo. Naturalmente, me llamó la atención— pero casi igual de naturalmente surgieron las dudas e inseguridades que gobiernan mi propia concepción de lo que soy capaz. “Pero yo no soy atleta. No podría viajar sola. Y ni tengo bici!” fue lo primero que pensé. Pero el universo tiene su manera de alinear los tiempos y las circunstancias tan perfectamente hasta que todo tenga sentido.
Por ende, aquí andamos: a un mes aproximadamente de embarcar en esta nueva aventura. Todo esto no es para decir que hayan desaparecido los titubeos. Sigo sin ser atleta, y después de varios meses de cuarentena, quizás hasta menos atlética que antes. Aún tampoco tengo bici. Pero encontré al compañero de viaje más adecuado que me motiva incondicionalmente, y su motivación me ayuda a opacar todos esos pensamientos debilitantes que pudieran restringir mis ganas de construir algo diferente.
¿Entonces, qué estoy lista para construir?
Con cada intento de responder esa pregunta, me surgen nuevas ideas que cambian y se moldean constantemente. Escapan cualquier fijación para mantenerse vivas y mantenerme creativa. Cada vez, la pregunta me invita a ver las cosas de otra manera. De negar que mi imaginación se estandarice o se colonice. Y con cada intento de responder, cambio yo también.
Andar en bici por Latinoamérica no es necesariamente una alternativa a la normalidad, sin embargo es la manera en que hemos decidido expandir nuestra imaginación y confrontar lo que yace más allá de lo familiar. Es el método, mas no la conclusión final. Si algo han demostrado estos meses de cuarentena es que siempre somos, hemos sido, y seguiremos siendo proyectos en construcción. Por lo tanto está en nosotros la posibilidad de hacer las cosas diferente. De vivir diferente.
¿Y tú, estás listx para ese "algo diferente"?
**Visita la pagina de mi compita inspirador bikeramble.com, quien estuvo casi 6 años pedaleando por el mundo!!
Comments